Está naciendo una nueva era tecnológica: la de la computación cuántica.
Este campo multidisciplinario –que aúna aspectos de ciencias de la computación, física y matemáticas y utiliza mecánicas cuánticas para resolver problemas complejos más rápido que los ordenadores tradicionales– cambiará radicalmente la forma en que protegemos nuestros datos y operamos en el ámbito digital.
A medida que avanzamos hacia esta nueva era, la computación cuántica no solo desafía los paradigmas actuales de seguridad, sino que también abre un horizonte de posibilidades sin precedentes para las empresas y gobiernos. La preparación y adaptación a este cambio se vuelven cruciales para asegurar una transición segura y aprovechar al máximo las oportunidades que esta revolución tecnológica tiene para ofrecer.
La fascinación por la computación cuántica trasciende lo teórico. Importantes empresas tecnológicas, centros universitarios y entidades investigadoras están destinando recursos considerables para el desarrollo de prototipos operativos y la investigación de sus aplicaciones futuras. Desde la criptografía avanzada hasta la simulación de moléculas complejas para el diseño de medicamentos innovadores, las oportunidades son aparentemente ilimitadas.
Si hablamos del impacto que podría llegar a tener en España, el presidente de Microsoft España, Alberto Granados, indica a Business People que “la computación cuántica abre nuevas oportunidades en áreas de conocimiento que requieren una gran potencia de cálculo. Pero es evidente que, en manos de ciberdelincuentes, podría comprometer la seguridad de los algoritmos de criptografía que se utilizan actualmente para proteger datos críticos”.

Computación cuántica
Más allá del 2026
Se anticipa que para el año 2026, la computación cuántica tenga un impacto comparable al de la inteligencia artificial generativa. Comparar estos dos avances tecnológicos es un desafío debido a sus diferentes etapas de desarrollo y aplicaciones.
En conversación con Bussines People, el experto SAS en Computación Cuántica, Bill Wisotsky, advierte que “el mercado está mostrando un progreso significativo, valorado actualmente en alrededor de 35.000 millones de dólares, y se proyecta que alcance un billón de dólares para 2030. De cara a los próximos cinco o diez años, podemos anticipar ventajas cuánticas para clases específicas de problemas, a pesar de los desafíos existentes en la escalabilidad y otros problemas que todavía necesitan ser resueltos”.
Wisotsky resalta que, para 2026, “esperamos ganancias tremendas, aunque sigue siendo incierto si igualarán el impacto de la IA generativa. Sin embargo, el escenario para 2030 parece prometedor, con expectativas de dispositivos cuánticos más potentes y algoritmos más profundos”.
Esto implicará un cambio drástico en el mundo de los negocios, así como beneficios en diversos sectores relacionados con las propiedades mecánicas cuánticas. A lo que el experto agrega que “es importante entender que no todos los problemas se pueden resolver gracias a la computación cuántica: deben ser lo suficientemente complejos como para que los sistemas clásicos tengan dificultades para resolverlos. Las prácticas que más se van a beneficiar del desarrollo de esta tecnología serán la optimización, el aprendizaje automático, la inteligencia artificial, la modelación molecular y la biología”.
“Si hablamos en clave industrial, todo lo relacionado con el sector sanitario, banca y sector público tienen mucho que ganar con las capacidades de la computación cuántica para optimizar procesos y reducir el consumo de energía” asevera Wisotsky.
El analista de datos explica que “la escalabilidad aritmética con la computación cuántica es actualmente un gran desafío. A medida que aumentamos el número de qubits, podremos abordar problemas más sofisticados en el mercado. Esto es particularmente relevante en el sector financiero, donde la hiperconectividad de los sistemas crea problemas combinatorios que necesitan ser explorados de manera diferente”.
Actualmente, la computación cuántica enfrenta importantes desafíos. La creación y mantenimiento de qubits estables es extremadamente compleja debido a la decoherencia y el ruido cuántico. Además, el desarrollo de algoritmos cuánticos eficientes y la corrección de errores cuánticos son áreas de investigación activa y cruciales para la viabilidad a largo plazo de esta tecnología.

El experto de SAS en Computación
Cuántica, Bill Wisotsky
Impactos en diversos sectores
La computación cuántica promete transformar profundamente el mundo empresarial al ofrecer capacidades de procesamiento y resolución de problemas sin precedentes. Su implementación afectará una amplia gama de sectores, proporcionando ventajas competitivas y abriendo nuevas oportunidades de innovación.
El presidente y CEO de IonQ, Peter Chapman, explica a Business People que “las computadoras cuánticas ya han demostrado la capacidad de evaluar el riesgo y estimar la magnitud de eventos raros, como cuánto cambiará el precio de una acción, utilizando “cópulas cuánticas” como datos de entrada para el valor en riesgo (VaR) y el déficit estimado”.
Champman argumenta que “las computadoras cuánticas fueron concebidas originalmente para resolver problemas difíciles en materiales y química. Esto se aplica fácilmente a aplicaciones farmacéuticas y sanitarias, como la simulación de compuestos complejos para un nuevo fármaco o mecanismos bioquímicos de administración de fármacos. Pero también se espera que las computadoras cuánticas influyan en los problemas logísticos farmacéuticos, como la identificación de combinaciones óptimas de terapias y una mejor comprensión de cómo un tratamiento afecta a otro”.
Por otra parte, el CEO deja saber que “IonQ ha trabajado con fabricantes de aerolíneas como Airbus para desarrollar nuevos enfoques para problemas de optimización que se sabe que son extremadamente difíciles para las computadoras clásicas. La carga de aeronaves es un problema de optimización práctica para la industria aeronáutica y, en última instancia, para los profesionales de la cadena de suministro: las computadoras cuánticas se pueden utilizar para calcular escenarios de carga y determinar el diseño y la distribución óptimos”.
Además, el presidente de IonQ destaca que “las computadoras cuánticas también se están utilizando activamente en la industria automotriz, con IonQ y Hyundai asociándose para estudiar la interacción entre las moléculas de óxido de litio y nuevos materiales catalizadores. El trabajo en curso puede conducir potencialmente a nuevas tecnologías de baterías de estado sólido y “post-litio”, aumentando la autonomía de los vehículos eléctricos y reduciendo el coste general de producción”.
Esta disciplina emergente y compleja requiere una combinación de conocimientos en física, matemáticas, informática y otras áreas. Actualmente, existen varios desafíos relacionados con la disponibilidad de personal cualificado para su desarrollo e implementación, a lo que el presidente y CEO de IonQ, Peter Chapman, agrega que “en este momento, hay una escasez activa de talento humano en el espacio cuántico. Sin embargo, esto debería ser temporal a medida que haya más recursos de capacitación disponibles”.
Y añade: “Por ejemplo, IonQ se asoció recientemente con South Carolina Quantum para implementar talleres de capacitación para investigadores y profesores de universidades para que puedan incorporar tecnologías cuánticas en sus cursos. A nivel internacional, IonQ ha vendido sistemas a instalaciones como quantumBasel para proporcionar a la industria europea, entidades gubernamentales e institutos de investigación acceso local y capacitación sobre los sistemas cuánticos más potentes de IonQ”.

El presidente y CEO de IonQ, Peter Chapman
La frontera de la seguridad
Una de las principales preocupaciones de la computación cuántica es el impacto que tendrá en la ciberseguridad. Wisotsky recuerda que “Peter Shor, del MIT, creó un algoritmo cuántico capaz de romper el cifrado RSA. Aunque las computadoras cuánticas lo suficientemente potentes para ejecutar este algoritmo aún están lejos, no se puede ignorar el problema. La mayoría de las empresas están implementando estrategias para desarrollar cifrado seguro cuántico. Por ejemplo, la última actualización del iPhone incluye cifrado seguro cuántico para iMessage”.
La Manager en Ciberseguridad, Privacidad y Riesgo Tecnológico de KPMG en España, Marta Pérez Merino, pone énfasis en que “la computación cuántica tiene el potencial de romper los sistemas criptográficos actuales y para poder hacer frente a los riegos en el ámbito de ciberseguridad, las empresas deben tomar medidas proactivas y también abordar otras preocupaciones relacionadas con esta tecnología emergente”.
Pérez resalta que es importante “revisar los algoritmos criptográficos que se utilicen en las organizaciones e instituciones y valorar si son algoritmos resistentes a ataques realizados por ordenadores cuánticos, de no ser así, convendría buscar alternativas y evitar los algoritmos de clave pública más populares, que pueden superarse por un ordenador cuántico suficientemente potente usando el algoritmo de Shor”.
Por otra parte, la manager en ciberseguridad de KPMG señala que “se debe tener en cuenta la necesidad de invertir en la capacitación de los equipos profesionales relacionados con la computación cuántica y con especial foto en materia de ciberseguridad y protección de datos, de tal forma que sean capaces de entender e interiorizar sus aplicaciones, tener una perspectiva abierta para la generación de nuevas ideas y, por supuesto, tomar consciencia de los desafíos y amenazas que supone un mal uso o aplicación de esta”.
“Una acción recomendable podría ser la de realizar auditorías exhaustivas para identificar sistemas y datos que dependan de la criptografía vulnerable y poder así implementar algoritmos de criptografía post-cuántica en sistemas críticos antes de que las computadoras cuánticas sean capaces de vulnerar los mecanismos de cifrado convencionales”, considera la experta en Ciberseguridad.
Sobre si existen algoritmos de cifrado que sean resistentes a los ataques de computadoras cuánticas, Marta Pérez indica que “actualmente es difícil saber con exactitud cuándo existirá un ordenador cuántico con la suficiente capacidad (diseño y qubits) para invalidar procedimientos que facilitan mecanismos de seguridad en las comunicaciones y redes digitales, normalmente mediante el uso de criptografía”.
“En el caso de existir un ordenador cuántico con la potencia adecuada, se podrían ejecutar algoritmos cuánticos conocidos con impacto en la protección de datos y comunicaciones digitales, como por ejemplo el algoritmo de Grover y el algoritmo de Shor”, precisa Pérez.

La Manager en Ciberseguridad, Privacidad y Riesgo Tecnológico de KPMG en España, Marta Pérez Merino
La criptografía es la clave
La computación cuántica representa un desafío significativo para la seguridad de las grandes empresas y del Estado, pero también ofrece oportunidades para desarrollar sistemas de seguridad más robustos.
El vicepresidente y Chief Information Security Officer de Zscaler, Sam Curry, explica que “en materia de criptografía, la tecnología cuántica podría acabar representando tanto una ventaja como una amenaza para las empresas. La diferencia estriba en si hablamos de criptoanálisis, romper códigos, o de criptología, intentar que los mensajes sean difíciles de descifrar”.
Curry precisa que “desde el punto de vista criptológico, la computación cuántica y, más en general, la tecnología cuántica, ofrece importantes ventajas, tanto en la generación de números aleatorios como en la compartición de secretos, con algunas ventajas adicionales de seguridad gracias a las propiedades del entrelazamiento cuántico”. También explica que “desde el punto de vista criptoanalítico, el impacto potencial del control cuántico es mucho menos positivo, y es ahí donde las empresas deben poner toda su atención”.
Para el CISO de Zscaler, “la habilidad de una computadora cuántica para romper estos sistemas de encriptación significaría que cualquier dato cifrado actualmente podría ser susceptible de ser descifrado en el futuro. Para las grandes empresas y el Estado, tanto en España como en el resto del mundo, esto implica una necesidad urgente de actualizar sus protocolos de seguridad y adoptar algoritmos resistentes a la cuántica que sean fáciles de crear, pero difíciles de descifrar, incluso con criptoanálisis cuántico, para asegurar sus comunicaciones y datos contra estas amenazas emergentes”.
Mientras la computación cuántica presenta desafíos críticos para la ciberseguridad, también abre nuevas posibilidades para proteger la información de manera más efectiva. La clave para navegar esta transición radica en la preparación proactiva, la inversión en investigación y desarrollo de criptografía poscuántica, y la formación continua de profesionales en este campo emergente. Solo así se podrá asegurar que la llegada de la computación cuántica fortalezca, en lugar de comprometer, la seguridad digital en la nueva era tecnológica.

El vicepresidente y Chief Information Security Officer de Zscaler, Sam Curry