Grupo Albia, referente en el sector funerario en España, anunció la incorporación de Carlos Sanza como director de su Área Jurídica y nuevo miembro del Comité Ejecutivo.
Con esta designación, la compañía refuerza su estructura interna para responder con mayor eficacia a las exigencias regulatorias del sector y acompañar su estrategia de crecimiento sostenible.
Grupo Albia, perteneciente a Santalucía, opera más de 250 centros funerarios en toda España y cuenta con aproximadamente 1.400 empleados.
Cada año presta más de 75.000 servicios funerarios, consolidándose como uno de los operadores líderes del sector.
Con más de dos décadas de trayectoria profesional, Sanza ocupó posiciones de alta responsabilidad en entornos complejos.
Fue director del Departamento Legal de SEUR, secretario general de la Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid, y director de Recursos Humanos y Legal en Grupo Ontime.
Esta experiencia le permitió consolidar un perfil que combina una sólida base jurídica con una clara visión estratégica y una capacidad probada para liderar equipos multidisciplinares.
“El área jurídica debe acompañar a la compañía en su evolución, anticipando riesgos, facilitando la toma de decisiones y garantizando la seguridad normativa en todos los procesos”, explicó Sanza.
“Me incorporo con entusiasmo a este proyecto, convencido de que desde el trabajo colaborativo y la excelencia técnica podemos aportar un gran valor”, añadió.
La búsqueda de Grupo Albia
Desde la dirección general, Daniel Palacios valoró positivamente el fichaje de Sanza.
“Con la incorporación de Carlos, damos un paso más en nuestro propósito de construir una compañía cada vez más preparada, eficiente y cohesionada. Su visión estratégica y su experiencia serán clave para fortalecer la integración del área jurídica con otras funciones esenciales del negocio”.
La llegada de Sanza se enmarca en una apuesta de Albia por una estructura organizativa más robusta y ágil, que integre de forma efectiva las funciones jurídico-mercantiles, de calidad y protección de datos, elementos cruciales en un entorno cada vez más regulado.
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