El Consejo de Administración de Indra, la empresa española líder en tecnología y consultoría, ha decidido otorgar competencias ejecutivas a Marc Murtra, quien hasta ahora se desempeñaba como presidente no ejecutivo de la compañía. Con esta nueva función, Murtra asumirá responsabilidades tanto en el ámbito corporativo como en el institucional, adicionales a su cargo como presidente del Consejo de Administración. José Vicente de los Mozos continuará como consejero delegado, manteniendo sus facultades delegadas sin cambios.
La decisión de otorgar funciones ejecutivas a Murtra coincide con el anuncio del plan estratégico de Indra para el período 2024-2026, que busca llevar a la compañía a una facturación de 6.000 millones de euros para el año 2026. Dentro de esta estrategia, Indra planea evolucionar hacia Indra Group, enfocándose en áreas de negocio con mayor proyección, como defensa y transporte. Este cambio busca aprovechar oportunidades de crecimiento y expandir el alcance de la empresa.
Una parte fundamental de esta transformación es la adquisición de Hispasat, con la que Indra busca reforzar su recién creada división de espacio. El objetivo es alcanzar una facturación de 1.000 millones de euros para el año 2030, centrándose en desarrollar capacidades avanzadas y ampliar su presencia en el sector espacial. El rol de Murtra en esta nueva etapa será fundamental para establecer relaciones con gobiernos, administraciones públicas y organismos internacionales, según indicó la empresa.
En respuesta a su nueva función, Marc Murtra expresó su gratitud hacia el Consejo de Administración por la confianza depositada en él para desempeñar funciones ejecutivas. «Estamos ante una nueva era en Indra que se caracteriza por el crecimiento y la expansión bajo el impulso de nuestro Plan Estratégico«, comentó Murtra. José Vicente de los Mozos, consejero delegado de la compañía, añadió que este cambio permitirá centrar los esfuerzos en la implementación del plan estratégico «Leading the Future».
La estrategia de Indra para 2024-2026
La estrategia de Indra para 2024-2026 pone un fuerte énfasis en el sector de defensa, donde la compañía pretende convertirse en el coordinador español en programas europeos terrestres, aéreos y del ciberespacio. Además, planea pasar de ser un mero suministrador de productos a un integrador de sistemas de defensa de referencia, extendiendo su alcance internacional mediante alianzas, fusiones y adquisiciones. La empresa también racionalizará y simplificará su portafolio para enfocarse en soluciones de alto valor y orientadas al cliente, centradas en tecnologías clave como radares, defensa electrónica, electroóptica, mando y control, comunicaciones y simulación.
En cuanto al sector espacial, Indra busca consolidarse como un actor europeo de primer nivel, con presencia en los principales programas de la Unión Europea. La visión de la empresa es desarrollar una oferta civil y militar completa, que aborde toda la cadena de valor, y aprovechar el ecosistema internacional para acelerar su crecimiento.
El enfoque estratégico de Indra refleja la importancia del sector espacial en el contexto europeo, especialmente dado el interés por garantizar autonomía estratégica y soberanía en comunicaciones. La empresa busca consolidar sus capacidades actuales en el espacio y colaborar con socios globales para impulsar el crecimiento inorgánico en Europa, con la ambición de alcanzar ingresos superiores a 1.000 millones de euros para el 2030.
Indra demuestra con estos movimientos su intención de posicionarse como líder en defensa y espacio, adoptando estrategias innovadoras y alineándose con las tendencias emergentes en el sector tecnológico. La reorganización interna y el refuerzo de sus áreas clave son parte de su apuesta por un crecimiento sostenido y rentable en los próximos años.
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