Duro Felguera, la histórica compañía asturiana especializada en la construcción de instalaciones de generación eléctrica, enfrenta un nuevo revés. La fiscalía anticorrupción ha solicitado este lunes una multa de 160 millones de euros para la empresa y dos de sus exdirectivos, en el marco de una investigación por una presunta trama de sobornos relacionada con la construcción de una central termoeléctrica en Venezuela. La cuantía de la sanción supera el valor total de la empresa en Bolsa, que actualmente fluctúa en torno a los 110 millones de euros de capitalización.La cuantía de la sanción supera el valor total de la empresa en Bolsa, que actualmente fluctúa en torno a los 110 millones de euros de capitalización.tación en el mercado.
Origen de la investigación
Los hechos que motivan la solicitud de la fiscalía se remontan a 2008 y 2009, cuando Venezuela enfrentaba una grave crisis energética. Como solución, el Gobierno de Caracas impulsó la construcción de la central termoeléctrica de El Sitio, en Santa Lucía, adjudicada a Duro Felguera por 1.500 millones de dólares. Según la acusación, Duro Felguera formó una UTE llamada Termocentro y firmó contratos con entidades y personas venezolanas para encubrir el pago de comisiones o sobornos a funcionarios públicos, con el fin de asegurar la adjudicación del proyecto.
Acusaciones y Sanciones Propuestas
La fiscalía alega que Duro Felguera comprometió hasta 105 millones de dólares en pagos a funcionarios venezolanos. Los exdirectivos Ángel Antonio del Valle Suárez y Juan Carlos Torres Inclán están acusados de autorizar estos pagos. Además, se solicita una pena de 8 años y 9 meses de prisión y una multa de 3,6 millones de euros para el exviceministro venezolano Nervis Villalobos, acusado de distribuir los fondos.
La fiscalía también propone penas para otros implicados, como Javier Ochoa Alvarado, exviceministro venezolano, quien ha colaborado con la justicia y podría enfrentar una pena reducida de 3 meses de cárcel y una multa de 1,6 millones de euros. Otros acusados incluyen a María Consuelo Pardí y Milagros Coromoto Torres, con penas de hasta 2 años y 9 meses de prisión.
Respuesta de Duro Felguera
Duro Felguera niega cualquier irregularidad. En enero, fuentes de la empresa afirmaron a Europa Press que no existían evidencias de conductas delictivas y que todas las actuaciones del grupo se ajustaron a compromisos contractuales legales. La empresa se encuentra en una situación financiera delicada desde 2013, exacerbada por la falta de liquidez y el impacto de la pandemia. En 2020, la SEPI inyectó 120 millones de euros para garantizar su viabilidad. Recientemente, dos socios industriales mexicanos, Mota Engil y Prodi, han invertido 90 millones de euros para salvar la compañía.
Consecuencias financieras y legales
Además de la multa solicitada, Duro Felguera enfrenta otros desafíos financieros. La Agencia Tributaria ha iniciado dos investigaciones por supuestas declaraciones incorrectas del impuesto sobre sociedades, resultando en acuerdos de liquidación por 153 millones de euros. Estos acuerdos han sido recurridos ante la Audiencia Nacional.
La situación ha afectado negativamente a las acciones de Duro Felguera, que han caído cerca del 14% en lo que va de año. La compañía, que cuenta con 1.300 empleados, sigue en el centro de la polémica y enfrenta un futuro incierto mientras lucha por superar estos desafíos legales y financieros.
Futuro incierto
Con un nuevo presidente, Jaime Isita, y un consejo de administración renovado, Duro Felguera se compromete a remontar el vuelo. Sin embargo, los problemas legales y la oposición de los accionistas minoritarios, que han criticado la gestión de la empresa y la intervención de la SEPI, complican este objetivo. La resolución de estos casos y la capacidad de la empresa para gestionar sus problemas financieros serán determinantes para su futuro.
La compañía debe enfrentar tanto las acusaciones de corrupción como las demandas fiscales, en un contexto de constante presión económica y jurídica. La manera en que Duro Felguera maneje estos desafíos será crucial para su supervivencia y su reputación en el mercado.
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