Puig BrandsManuel Puig Rocha, una de las caras visibles de la famosa fortuna cosmética catalana, se ha convertido en toda una figura a seguir en la bolsa española este inicio de año. Pero aquí no estamos hablando de Puig, la icónica firma de perfumes, sino de una empresa que tiene más que ver con piscinas que con fragancias: Fluidra.
El movimiento bursátil de Puig en Fluidra está haciendo ruido, y no es para menos. Como consejero de la compañía, cada paso que da debe ser reportado a la CNMV (la Comisión Nacional del Mercado de Valores). Pero lo llamativo no es solo eso, sino la intensidad con la que está jugando en el parqué: en apenas 11 días, entre el 2 y el 13 de enero, su sociedad Schwarzsee 2018 SL ha comprado 546.113 acciones de Fluidra por un total de 12,9 millones de euros. ¿El resultado? Puig ya controla un 0,28% más de la compañía en 168 operaciones.
Y no es algo puntual. En los últimos siete meses, ha realizado 288 movimientos en bolsa sobre Fluidra, especialmente al cierre de cada trimestre. Estas inversiones, que suman unos impresionantes 30 millones de euros, le han llevado a acumular 1,34 millones de acciones (el 0,7% del capital total de Fluidra). Para ponerlo en perspectiva, su participación ha crecido del 7% que tenía a principios de 2024 al actual 7,7%, colocándose como el tercer mayor accionista.
Un tándem poderoso: Puig + Godia
El crecimiento de Puig no se limita a su propia participación. Su sociedad Schwarzsee 2018 tiene una alianza estratégica con la familia Godia, otro peso pesado en Fluidra. Juntos, este dúo de titanes roza el 14% del capital de la compañía, consolidándose como un bloque cada vez más importante frente a Rhone Capital (que controla el 11%) y el pacto accionarial de las familias fundadoras, que incluyen a los Serra Duffo, Garrigós, Planes y Corberá.
Por cierto, Puig no es un recién llegado a Fluidra. Se subió al barco en 2012 con la compra de un 5% de las acciones originales. Aunque su participación inicial se diluyó tras la fusión con el grupo estadounidense Zodiac, su apuesta reciente demuestra que va con todo para recuperar terreno.
Los pactos que gobiernan Fluidra
Fluidra está gobernada por dos grandes pactos accionariales. El primero, que incluye a Rhone y varias de las familias fundadoras, suma cerca del 39% del poder de voto. Este grupo fue clave para reforzar la posición de Eloi Planes como presidente tras la salida de Bruce Brooks como CEO, aunque recientemente el liderazgo ejecutivo pasó a manos de Jaime Ramírez.
Por otro lado, el segundo pacto, firmado en 2023, une las fuerzas de Puig y Godia. Esta alianza les ha permitido consolidarse como un contrapeso dentro de la empresa y marca un movimiento estratégico frente a la progresiva retirada de Rhone Capital, que en los últimos años ha ido reduciendo su participación.
¿Qué significa todo esto?
La jugada de Puig Rocha no solo pone de manifiesto su interés en Fluidra, sino que también refleja una tendencia cada vez más habitual en el mundo empresarial: la consolidación del control mediante alianzas estratégicas. Además, con una compañía como Fluidra, que se especializa en piscinas y wellness, el potencial de crecimiento es enorme, especialmente en un mercado internacional donde la marca sigue expandiéndose.
© Reproducción reservada